Cómo ambientar mi espacio

El olfato es el sentido encargado de detectar y procesar los olores y es un sentido muy poderoso para dar respuestas de forma consciente.

Wikipedia define el olfato como un sentido químico en el que actúan como estimulantes, las partículas aromáticas u odoríferas desprendidas de los cuerpos volátiles que, a través del aire inspirado, entran en contacto con el epitelio olfatorio situado en la nariz. Somos capaces de procesar  más de 10.000 olores y según lo que procesamos nuestro cerebro genera una respuesta u otra. Por ejemplo, cuando olemos un alimento que está en mal estado, enseguida somos capaces de identificar que no está en condiciones y rechazarlo.

De la misma manera que nuestro cerebro reacciona ante sensaciones negativas, también responde a las positivas y por ello podemos estimular el sentido del olfato para crear el espacio que necesitemos. Os proponemos trees formas rápidas y sencillas de hacerlo:

1. Usando tu difusor de cerámica.

Crea tu espacio de forma rápida y purifica tu ambiente para tu disfrute. 

El difusor es silencioso, sólo se escucha levemente el sonido del agua evaporándose, y al evaporarse crea un efecto visual relajante.

2. Añadiendo unas gotas en un pañuelo.

Huele el pañuelo y transpórtate al espacio que necesites. Una forma muy rápida si no tienes el difusor a mano. También puedes destapar la botella y oler directamente.

3. Preparando una mezcla con un aceite portador.

Mezcla unas gotas del aceite esencial con una cucharada de aceite portador y masajea la zona (las piernas, la espalda, el cuello, etc.). En algunos casos, si no tienes aceite vegetal portador puedes añadir 1-2 gotas en tu crema corporal habitual. Para asegurar que no tienes ninguna reacción alérgica nuestra recomendación es que pruebes primero la mezcla en el codo.